La pobreza muy probablemente es la enfermedad social más grave de nuestra época, pues en derredor de los pobres y de los indigentes se incuban y surgen un sinnúmero de otros graves inconvenientes sociales, como por ejemplo la prostitución y el proxenetismo, así como también la pornografía infantil y juvenil, la corrupción administrativa y política, el narcotráfico y el consumo de sustancias adictivas y nocivas, la violencia familiar y callejera, la delincuencia, la marginación, las guerras, la propia degradación del medio ambiente, la vagancia, el desempleo, el desinterés por la propia capacitación y por la propia cultura, la indiferencia social, la pérdida o la no adquisición de valores morales y éticos, etcétera, etcétera, etcétera…
Todos estos problemas se relacionan y se imbrican unos con otros, de tal manera que es difícil identificar donde están las causas y donde están las consecuencias…
Posiblemente la complejidad de esta cuestión es la que en buena medida está incidiendo sobre la poca efectividad de las soluciones que hasta ahora han sido ensayadas…
Ciertamente habrá que actuar con mucha creatividad e ingenio, si es que se quiere resolver el problema de la pobreza y de la indigencia en nuestro planeta…
Como contribución personal a este asunto, en las siguientes líneas trataremos de esbozar una interpretación de esta problemática, así como una posible vía de solución a la misma…
Véase que a mediados del siglo XX se inicio una confrontación este-oeste, una confrontación de oriente con occidente, una confrontación entre el llamado “mundo socialista” y el llamado “mundo capitalista”…
Esta confrontación capitalismo-socialismo fue llamada “guerra fría”, pues ambos bloques se cuidaron de no iniciar una guerra abierta total, restringiéndose entonces tanto al enfrentamiento diplomático como así también al propio choque bélico, pero limitando esos conflictos armados a determinadas zonas del planeta y a extensiones bien circunscritas y demarcadas, y muchas veces llevando a cabo estas acciones guerreras a través de grupos locales y/o de comandos con pocos integrantes…
La “guerra fría” terminó abruptamente ya faltando poco para que finalizara el siglo XX , y este punto de ruptura y cambio quedó marcado por amplias protestas sociales y por notorios problemas económicos que en ese entonces tuvieron que soportar varios gobiernos socialistas en Europa del Este, y que en forma rápida derivó en muy importantes cambios políticos en esa zona, en el abandono de la economía dirigista y centralizada en muchos países, y en la implantación allí también de la economía de mercado…
Sólo con la finalidad de marcar los sucesos más emblemáticos asociados con el fin de la “guerra fría” y con el desplome del “mundo socialista europeo”, correspondería recordar (a) el fin del llamado Muro de Berlín ocurrido el 9 noviembre 1989, y (b) el desmembramiento y disolución de la URSS, proceso que se inició en 1990, y que culminó el 25 diciembre 1991 con la renuncia de Mijaíl Gorbachov como Presidente de esa unión…
Nótese también que en los años 2007-2008 ocurrieron significativas turbulencias económico-financieras principalmente en EEUU aunque también a nivel mundial, caracterizadas ellas por quiebres de importantes instituciones bancarias y financieras, así como también por importantes oscilaciones de las cotizaciones en las bolsas de valores y en las paridades monetarias, hechos que ciertamente llamaron la atención por su magnitud, y que en alguna medida se agregaban a otros de similar naturaleza ocurridos con anterioridad en el siglo XX y en estos primeros años del siglo XXI…
Tal vez aún es muy pronto para dar una interpretación segura a estos sucesos económico-financieros ocurridos en estos inicios del siglo XXI, aunque en lo personal opinamos que esos acontecimientos son demasiado significativos como para no inducir un cambio de tendencias a nivel mundial, y que dicho cambio o quiebre podría significar el fin de la era dólar, e incluso el fin de la propia supremacía estadounidense en lo productivo y en lo geopolítico…
Lo que vendrá en buena medida dependerá de las grandes decisiones que se tomen en estos días…
Nuestra reflexión final es que los resultados económicos parecerían ser los verdaderos dueños de la situación…
En efecto y como ya se indicó, a mediados del siglo XX surgieron con mucha fuerza dos súper potencias mundiales indiscutibles: EEUU y URSS… y en ese entonces daba la impresión que nada ni nadie podía oponérseles… Sin embargo la economía pudo doblegar a la URSS, y parecería que también está doblegando hoy día a EEUU…
La conclusión lógica que puede extraerse de estos señalamientos, es que debemos observar la evolución de las fuerzas económicas con muchísimo cuidado y con muchísima atención, pues ellas lo que afectan ni más ni menos es la propia eficiencia o ineficiencia productiva y la propia situación social, y en consecuencia las derivaciones que se provoquen tanto pueden ser para bien como para mal…
Volvamos ahora a nuestra problemática inicial: la pobreza…
Muy posiblemente es la economía la que ha amplificado la pobreza llevándola a los niveles de desastre que se observan en este inicio del siglo XXI, y muy posiblemente es la economía la que podría sacar a la pobreza y a la indigencia de su actual atolladero…
La economía debe ayudarnos a poner un orden nuevo en nuestra estructura social y productiva…
Y en nuestra opinión ello es perfectamente factible, en la medida que se efectúe una importante reestructuración en el sistema financiero internacional, y en la medida que las especies dinerarias actuales sean todas ellas sustituidas por monedas telemáticas…
Y en este último sentido, haríamos muy bien en considerar con suma atención la prédica y las sugerencias que desde hace años viene llevando adelante el Centro Joan Bardina en relación al capitalismo comunitario y en relación a las ventajas que podría aportar el uso extendido y generalizado del dinero telemático… Desde aquí por tanto invitamos a los eventuales lectores de estas líneas, a que también se interesen en la abundante documentación generada por dicho centro catalán de investigación… Esta documentación puede ser fácilmente ubicada en el sitio web http://www.bardina.org/
Todos estos problemas se relacionan y se imbrican unos con otros, de tal manera que es difícil identificar donde están las causas y donde están las consecuencias…
Posiblemente la complejidad de esta cuestión es la que en buena medida está incidiendo sobre la poca efectividad de las soluciones que hasta ahora han sido ensayadas…
Ciertamente habrá que actuar con mucha creatividad e ingenio, si es que se quiere resolver el problema de la pobreza y de la indigencia en nuestro planeta…
Como contribución personal a este asunto, en las siguientes líneas trataremos de esbozar una interpretación de esta problemática, así como una posible vía de solución a la misma…
Véase que a mediados del siglo XX se inicio una confrontación este-oeste, una confrontación de oriente con occidente, una confrontación entre el llamado “mundo socialista” y el llamado “mundo capitalista”…
Esta confrontación capitalismo-socialismo fue llamada “guerra fría”, pues ambos bloques se cuidaron de no iniciar una guerra abierta total, restringiéndose entonces tanto al enfrentamiento diplomático como así también al propio choque bélico, pero limitando esos conflictos armados a determinadas zonas del planeta y a extensiones bien circunscritas y demarcadas, y muchas veces llevando a cabo estas acciones guerreras a través de grupos locales y/o de comandos con pocos integrantes…
La “guerra fría” terminó abruptamente ya faltando poco para que finalizara el siglo XX , y este punto de ruptura y cambio quedó marcado por amplias protestas sociales y por notorios problemas económicos que en ese entonces tuvieron que soportar varios gobiernos socialistas en Europa del Este, y que en forma rápida derivó en muy importantes cambios políticos en esa zona, en el abandono de la economía dirigista y centralizada en muchos países, y en la implantación allí también de la economía de mercado…
Sólo con la finalidad de marcar los sucesos más emblemáticos asociados con el fin de la “guerra fría” y con el desplome del “mundo socialista europeo”, correspondería recordar (a) el fin del llamado Muro de Berlín ocurrido el 9 noviembre 1989, y (b) el desmembramiento y disolución de la URSS, proceso que se inició en 1990, y que culminó el 25 diciembre 1991 con la renuncia de Mijaíl Gorbachov como Presidente de esa unión…
Nótese también que en los años 2007-2008 ocurrieron significativas turbulencias económico-financieras principalmente en EEUU aunque también a nivel mundial, caracterizadas ellas por quiebres de importantes instituciones bancarias y financieras, así como también por importantes oscilaciones de las cotizaciones en las bolsas de valores y en las paridades monetarias, hechos que ciertamente llamaron la atención por su magnitud, y que en alguna medida se agregaban a otros de similar naturaleza ocurridos con anterioridad en el siglo XX y en estos primeros años del siglo XXI…
Tal vez aún es muy pronto para dar una interpretación segura a estos sucesos económico-financieros ocurridos en estos inicios del siglo XXI, aunque en lo personal opinamos que esos acontecimientos son demasiado significativos como para no inducir un cambio de tendencias a nivel mundial, y que dicho cambio o quiebre podría significar el fin de la era dólar, e incluso el fin de la propia supremacía estadounidense en lo productivo y en lo geopolítico…
Lo que vendrá en buena medida dependerá de las grandes decisiones que se tomen en estos días…
Nuestra reflexión final es que los resultados económicos parecerían ser los verdaderos dueños de la situación…
En efecto y como ya se indicó, a mediados del siglo XX surgieron con mucha fuerza dos súper potencias mundiales indiscutibles: EEUU y URSS… y en ese entonces daba la impresión que nada ni nadie podía oponérseles… Sin embargo la economía pudo doblegar a la URSS, y parecería que también está doblegando hoy día a EEUU…
La conclusión lógica que puede extraerse de estos señalamientos, es que debemos observar la evolución de las fuerzas económicas con muchísimo cuidado y con muchísima atención, pues ellas lo que afectan ni más ni menos es la propia eficiencia o ineficiencia productiva y la propia situación social, y en consecuencia las derivaciones que se provoquen tanto pueden ser para bien como para mal…
Volvamos ahora a nuestra problemática inicial: la pobreza…
Muy posiblemente es la economía la que ha amplificado la pobreza llevándola a los niveles de desastre que se observan en este inicio del siglo XXI, y muy posiblemente es la economía la que podría sacar a la pobreza y a la indigencia de su actual atolladero…
La economía debe ayudarnos a poner un orden nuevo en nuestra estructura social y productiva…
Y en nuestra opinión ello es perfectamente factible, en la medida que se efectúe una importante reestructuración en el sistema financiero internacional, y en la medida que las especies dinerarias actuales sean todas ellas sustituidas por monedas telemáticas…
Y en este último sentido, haríamos muy bien en considerar con suma atención la prédica y las sugerencias que desde hace años viene llevando adelante el Centro Joan Bardina en relación al capitalismo comunitario y en relación a las ventajas que podría aportar el uso extendido y generalizado del dinero telemático… Desde aquí por tanto invitamos a los eventuales lectores de estas líneas, a que también se interesen en la abundante documentación generada por dicho centro catalán de investigación… Esta documentación puede ser fácilmente ubicada en el sitio web http://www.bardina.org/
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